¿Cuántas veces te ha tocado un vuelo de larga escala y no sales del aeropuerto? A veces llegamos a tener escalas de hasta 12, 20 o más horas y no aprovecharlas para conocer nuevos lugares te hace un viajero inexperto.
Si este es tu caso te dejaremos algunos tips para aprovechar estas escalas.
Al saber qué pasarás horas sin moverte de una ciudad para llegar a tu destino final, te mantendrá en calma y podrás planificar tus actividades durante este tiempo para sacarle el mayor provecho posible.
Podrás prevenirte con libros, ropa y todo lo indispensable para pasar de forma agradable estas siguientes horas.
Si tu escala es nocturna, te recomendamos que el único plan sea dormir y si acaso leer un libro o jugar en tu celular para matar el tiempo. Puedes dormir en el aeropuerto o bien en algunas ciudades hay cabinas o cápsulas de descanso con alguna que otra amenidad para no pasarla tan incómodo.
Además, dormir te hará descansar para no pasarla tan mal con el temido jet lag.
Nuestro plan favorito siempre que el tiempo lo permita. Esta alternativa es ideal si tienes una escala larga durante la mañana o la tarde, por ejemplo, si llegas a tu escala en la Ciudad de México a las 7 de la mañana ¡Perfecto!
La vida comienza temprano en esta ciudad, puedes alquilar un servicio de lockers y moverte a un café al centro que está a 25 minutos del aeropuerto y de ahí seguir explorando con un itinerario
Aquí tenemos algunos tips para darte como:
- anota la zona de la ciudad que más te interesa conocer.
- Ten en cuenta las rutas del transporte público o el tráfico, si es que tomas transporte privado.
- Destina un pequeño presupuesto para tus actividades dentro de tu escala, para no agarrarte desprevenido.
- Sal del aeropuerto con lo básico y un suéter todo terreno, a veces no sabemos cómo va a estar el clima y lo ideal es salir ligeros, cómodos pero prevenidos.
- Toma en cuenta el trayecto de regreso al aeropuerto, pues más vale pasar unas horas esperando tu vuelo que andar corriendo con la incertidumbre de perder el vuelo.
Al final, viajar siempre se trata de que viajes de la forma que te gusta. Así que, adáptate a la situación y manéjala a tu gusto, si quieres quedarte y dormir, duerme, si quieres alocarte e ir de fiesta, vete, si quieres explorar museos o monumentos ¡Hazlo! Nunca te limites porque ese viaje solo se vive una vez.